“El juego va a ser difícil, pero tenemos cuatro días para recuperar. Vamos a tratar de hacer un buen partido, la conducción del Sao Paulo me da responsabilidades, por lo que se trabajará para continuar en la competición. Nuestro equipo demostró una evolución en los últimos partidos, haremos todo lo posible para asegurar un lugar en La Paz “, afirmó ayer el experimentado entrenador argentino, Edgardo Bauza, quien descuenta que el plantel brasileño vendrá a matar o morir a La Paz.
El uruguayo Diego Lugano quiere jugar el partido y sacar un resultado positivo en el estadio Hernando Siles para devolver la confianza al equipo y por lo tanto mantener la búsqueda de su cuarto título.
“El más fuerte es la última batalla, en este juego se juega mucho, tal vez el partido más difícil por las condiciones de La Paz. Vamos a tener que ser más perfectos que en otros juegos. Con el inicio que tuvimos, el trabajo sería una reaparición importante. En Bolivia, hay que contar con una organización impecable”, afirmó el experimentado Lugano.
El plantel brasileño está mentalizado para hacer el mejor partido de Copa Libertadores, por eso es que bajo la conducción del argentino Bauza, ahora tienen en la mira a los atigrados.
De acuerdo a un dispositivo logístico, el plantel brasileño pretende llegar a Santa Cruz el próximo miércoles y de ahí se trasladará a La Paz el mismo día del partido, en horas de la tarde.
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