lunes, 15 de febrero de 2016

El brasileño Sao Paulo va por su cuarta estrella



Pasaron 11 años desde la última vez que levantó el trofeo de campeón de la Copa Libertadores de América, es por esa razón que el brasileño Sao Paulo aspira, en esta edición del certamen de clubes, recuperar protagonismo y alcanzar su cuarta estrella, y para ello conformó un plantel reforzado con jugadores que le pueden dar mayor solidez y ayudarle a alcanzar ese objetivo.

En su 18ª participación en la Copa —que ganó en 1992, 1993 y 2005—, los paulistas no se fían de nada y, tras jugar la primera fase, en la que eliminaron al peruano César Vallejo, aguardan con todo a The Strongest, pasado mañana (17.30) en el estadio Pacaembú.

Según el periodista Bruno Grossi, del diario Lance!, la primera tarea a la que está abocado el plantel es construir una defensa sólida y firme. En ello trabaja el entrenador, el argentino Edgardo Bauza, contratado para esta temporada con la misión de devolverle al Sao Paulo los logros deportivos.

“El equipo quiere recuperar el sitial que se ganó en la historia del fútbol brasileño y también en la Copa Libertadores. La directiva les prometió a los hinchas que estarán nuevamente orgullosos del club porque éste será protagonista en todos los torneos que juegue, dejando atrás el pasado inmediato”, explicó Grossi.

El club cuenta con su principal figura en buenas condiciones, el hábil volante de clase internacional Paulo Henrique Ganso, quien ya sabe de jugar en La Paz.Bauza tiene en mente consolidar un tridente ofensivo con Alan Kardec, Ganso y Jonathan Callieri, quien solo está habilitado para la Libertadores y ya convirtió un gol en Perú.

La base del equipo es: Denis, en portería; Bruno, Lucao, Rodrigo Caio y Eugenio Mena, en defensa; Hudson, Thiago Mendes y Michel Bastos, en la mitad; Paulo Henrique Ganso, Jonathan Callieri y Alan Kardec, adelante.

En el caso de Denis, el arquero tiene la difícil misión de reemplazar al gran ídolo paulista Rogerio Ceni, quien dejó la portería y se despidió del fútbol además como un arquero goleador, pues su característica era la de atajar pero también convertirles goles a los rivales. Asimismo, se ha incorporado el uruguayo Diego Lugano, un defensor que regresa a la que ya fue su casa en Brasil.

“Este Sao Paulo tiene una defensa más firme, un juego más batallador, pero menos preciosista que antes. Es decir, antes brillaba más, pero no tenía resultados; ahora quiere triunfos y juega a puro huevos”, matizó Grossi.

Para jugar ante The Strongest, en su primer partido de la fase de grupos, Bauza anticipó que pondrá una alineación en la que guardará a algunas figuras para esperar otros encuentros.

Fichó al DT Bauza, además de Lugano y Callieri

Precisamente con el propósito de que el equipo vuelva a pelear y ganar otro título de Copa Libertadores, la directiva de Sao Paulo efectuó tres fichajes importantes: el del entrenador argentino Edgardo Bauza, del zaguero uruguayo Diego Lugano y del atacante, también nacido en argentina, Jonathan Callieri.

“Deportivamente el Sao Paulo es uno de los desafíos más grandes en mi carrera y es muy lindo trabajar con un equipo de tanta exigencia”, manifestó el técnico que conquistó ya dos veces la Libertadores, con Liga de Quito en 2008 y con San Lorenzo en 2014.

Lugano dijo que viene a poner el pecho a las balas y que asume el reto de que pueda ayudar a levantar al plantel. El uruguayo ya jugó en el cuadro paulista entre 2003 y 2005, periodo en el que conquistó la Copa Libertadores, el Mundial de Clubes de la FIFA y el Campeonato Brasileño.

El zaguero evitó calificarse como el nuevo líder del equipo tras la salida del capitán Rogerio Ceni, quien con 131 goles (69 de penal, 61 de falta y uno en juego) anotados en 1.237 partidos disputados en sus 25 años de carrera se despidió del club como una verdadera leyenda viva.

Con relación a Callieri, el delantero ex Boca Juniors llegó para disputar solo la Copa Libertadores, no así el certamen brasileño para el que no fue habilitado.

Hubo dos históricos empates bolivianos

El gran Municipal de los años 70 y San José a principios de los 90 lograron dos históricos resultados, empatarle al Sao Paulo por Copa Libertadores, ambos en condición de visitantes.

Por este certamen, nunca un equipo boliviano le ganó al conjunto tricolor en su país, pero sí hubo esas dos igualdades celebradas como triunfos.

El 30 de abril de 1974, en el estadio Morumbí, de la ciudad de Sao Paulo, ante cerca de 15.000 aficionados, el cuadro del barrio de Sopocachi empató a tres goles, con dos tantos de Nicolás Linares y uno de Mario Lladó.

Ese plantel de Municipal fue uno de los mejores de su historia con jugadores como Zaya Mora, Jaime Rimazza, Pablo Baldivieso y René Domingo Taritolay, entre algunos de los más destacados que tuvo el equipo paceño.

Sao Paulo fue subcampeón de la Libertadores de ese año y solo perdió con el argentino Independiente de Avellaneda.

El otro gran resultado boliviano fue el 7 de abril de 1992, cuando en el mismo gigante Morumbí, esta vez San José de Oruro igualó contra el Sao Paulo a un tanto. El del empate santo fue convertido por Lorgio Antelo. Antes había marcado el goleador local, Palinha.

Fue el San José que tuvo a Emilio Ludueña, Gustavo Quinteros, Pedro Rioja, José Daniel Valencia, Juan Carlos Sánchez y Álvaro Peña, entre otros. Ese cuadro paulista contaba con el lateral Cafú y el atacante Raí, y se consagró bicampeón de la Libertadores 92 y 93

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