Ronaldinho, que acaba contrato con Atlético Mineiro el próximo 31 de diciembre, ha flirteado con un posible regreso al PSG, en el que ya militó entre 2001 y 2003, cuando recaló en Barcelona de España.
Su número de la suerte. "Llevo al PSG en mi corazón, fue mi primer equipo en Europa. El público siempre me trató con un cariño fuera de lo común, sigo recibiendo cartas de hinchas parisinos. No pienso más allá del Mundial de Clubes, al que confío en poder llegar. Pero a cualquier jugador del mundo le gustaría tener la felicidad de acabar su carrera en un 'grande' como el PSG", ha explicado Ronnie, de 33 años, en declaraciones a C+ Francia.
El Gaúcho, que está recuperándose de una lesión muscular en el muslo izquierdo, ha hablado al hilo de dos amigos suyos actualmente militantes en el equipo galo, Zlatan Ibrahimovic, con quien coincidió en Milán, y el también exblaugrana Thiago Motta.
"No coincidimos durante mucho tiempo, pero Ibrahimovic siempre fue amable y humilde. Sinceramente es uno de los mejores delanteros del mundo", aseguró el crack brasileño.
"Y Motta es mi hermano, es un chico que me ayudó mucho cuando llegué a Barcelona. Estaba totalmente solo y él me ayudó a adaptarme a una nueva cultura. Al igual que a una nueva forma de ver las cosas", finalizó Ronaldinho.
El PSG, que ha formado un equipo con puras estrellas, ahora busca que Ronaldinho se decida a incluirse en el equipo para la próxima temporada. De concretarse se daría un gran vuelco dado la magnitud de jugador que es el crack brasileño.
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