El Palestino chileno fue ayer una presa fácil para un Flamengo rabioso que llegó al estadio Luso Brasileiro sin técnico oficial, con muchos reservas y en crisis, pero salió reforzado con una goleada por 5-0 y en poder de la última plaza para los octavos de final de la Copa Sudamericana.
El decimosexto clasificado se medirá con el Chapecoense, el campeón del torneo en 2016.
La goleada a domicilio por 2-5 que el Flamengo infligió el 5 de julio en el partido de ida de la serie, jugado en la Cisterna de Santiago, obligaba de antemano al Palestino a obrar un milagro en Río de Janeiro. La segunda fase de la Sudamericana terminó hoy con la más abultada eliminatoria: diez goles a favor del Flamengo, y dos marcados por el Palestino.
Este choque de vuelta bien pudo durar 4 minutos, tiempo que necesitó el ariete Felipe Vizeu para fijar el 1-0.
Peor para los pupilos de Germán Cavalieri pues a los 10 minutos el defensa Geuvanio fijó el 2-0 transitorio.
El encuentro no tuvo equivalencias y en apenas tres minutos, antes de marchar los equipos a los vestuarios para el descanso, Everton Ribeiro y William Arao cavaron con sus goles la fosa de los chilenos.
Ribeiro marcó en suyo a los 41 minutos y Arao en el 43.
Y en el segundo tiempo, a pesar de que los elegidos por el técnico interino Jayme de Almeida habían decidido sacar el pie del acelerador, Vinicius Júnior, el joven de 16 años que ha fichado el Real Madrid, apareció en escena para poner el 5-0 al partido a los 73 minutos.
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