El Gremio anunció ayer el fichaje para las dos próximas temporadas del ecuatoriano Michael Arroyo, procedente del América mexicano, informó el club brasileño.
Arroyo, de 30 años, firmó un contrato hasta diciembre de 2019 y su llegada permitirá reforzar el ataque de los gauchos de cara al abultado calendario que tendrán que afrontar en las próximas semanas, con la Copa Libertadores como principal desafío.
El internacional con Ecuador se desempeña como mediapunta con la posibilidad incluso de ocupar posiciones en el frente del ataque, donde mostró un buen rendimiento en el conjunto mexicano junto con Oribe Peralta.
Arroyo inició su carrera en el Emelec, de Guayaquil, la ciudad donde nació.
También en su país defendió los colores del Barcelona de Guayaquil y el Deportivo Quito, con los que consiguió dar la vuelta olímpica del campeonato nacional.
Posteriormente, su periplo por México le llevó a militar en el San Luis Potosí, Atlante y América, donde despuntó definitivamente y sumó a su expediente una liga y dos Concacaf, la última precisamente en la pasada temporada.
El ecuatoriano ya se entrenó la tarde de este jueves sin que su fichaje haya supuesto un desembolso para el club ya que llegó como libre al no renovar su contrato con la escuadra azteca.
El Gremio ocupa la segunda plaza en el Campeonato Brasileño, a cuatro puntos del líder, el Corinthians, y la próxima semana jugará en Argentina ante el Godoy Cruz de Mendoza en la ida de los octavos de final de la Copa Libertadores.
El Gremio tiene en su plantilla al zaguero argentino Walter Kannemann, al atacante peruano Beto Da Silva, al artillero paraguayo Lucas Barrios y al también ecuatoriano Miller Bolaños, quien se recupera de una lesión.
Ya el centrocampista uruguayo Maxi Rodríguez y el delantero sudafricano Tyroane Sandows fueron declarados transferibles.
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