El presidente de la Confederación Brasileña de Fútbol (CBF), Marco Polo Del Nero, uno de los acusados de corrupción en el caso de la FIFA, volvió hoy (ayer) al cargo después de haberse tomado un mes de licencia.
Del Nero fue sustituido en el último mes por el vicepresidente Marcus Vicente que, al dejar hoy (ayer) el cargo, afirmó en un video publicado por la CBF, que ya había acordado el relevo en esta fecha con el titular de la presidencia de la federación brasileña.
El actual presidente se apartó de la CBF el 3 de diciembre pasado con el objetivo de preparar su defensa de las acusaciones de corrupción que enfrenta tanto en la justicia estadounidense como en el Comité de Ética de la FIFA, que le ha abierto un procedimiento disciplinario.
Según la prensa brasileña, Del Nero puede anunciar su renuncia definitiva a la CBF, en los próximos días y si esa información se confirma, el dirigente sería sustituido por el vicepresidente de más edad, según los estatutos del ente.
En ese caso, el encargado de suceder a Del Nero será Antonio Carlos Nunes de Lima, de 77 años, un dirigente del estado de Pará que fue designado vicepresidente de la CBF el pasado diciembre.
La designación de Nunes, que ocupa la plaza dejada vacante por el ex presidente de la CBF José María Marín, quien está arrestado en Nueva York por el caso de corrupción de la FIFA, fue duramente criticada por los opositores a la actual directiva de la federación.
El vicepresidente Delfim Peixoto, opositor a Del Nero y quien por edad (74 años) era el primero en la línea de sucesión, calificó la elección de Nunes como un "golpe".
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