Scolari no lo dice, pero su ‘era’ se acaba

El entrenador de Brasil, Luiz Felipe Scolari, dijo ayer, en una conferencia de prensa, que cuando finalice el Mundial-2014 analizará con la Confederación Brasileña de Fútbol (CBF) su futuro al frente de la seleçao, tras la catastrófica derrota ante Alemania por 7-1 en semifinales el martes, pero se da por descontado que el sábado dirigirá por última vez a la canarinha, en el partido por el tercer lugar.

Las agencias AFP y EFE dieron cuenta ayer sobre lo que dijo Scolari en el encuentro con los periodistas: “Tenemos compromiso con la Confederación Brasileña de Fútbol hasta el final del Mundial, y el final del Mundial es el sábado. Después de eso probablemente voy a conversar con la CBF. La definición pasa por la presidencia (de la federación)”, dijo Scolari en Teresópolis, donde se encuentra el campamento de la seleçao.

Brasil jugará pasado mañana en el estadio Mané Garrincha de Brasilia, en su despedida. Felipao admitió que la goleada de Alemania en el estadio Mineirao de Belo Horizonte “fue la peor de todas las derrotas” de la selección brasileña y que no esperaba “el resultado catastrófico”.

“El marcador quedará para la historia, pero también hay que registrar que es la primera vez que Brasil llega a una semifinal desde el Mundial-2002”, sostuvo el DT al referirse a la cita en Japón y Corea del Sur que ganó la verdeamarilla bajo su mando.

El experimentado orientador agregó que no le encuentra explicaciones a la sucesión de cuatro goles que anotó Alemania entre los minutos 23 y 29, tras haber abierto el marcador en el 11. Alemania completó la goleada al 69 y 79 y Óscar descontó al 90.

“El resultado queda en la historia, pero la vida sigue”, indicó Felipao y agregó que “yo voy a seguir con mi vida, mis jugadores también van a seguir con las suyas. Continúan vencedores. Tenemos que seguir”, comentó y estimó que el 80%” del actual plantel de Brasil jugará el Mundial de Rusia-2018.

La humillante goleada, la más abultada que recibió la selección brasileña en su historia, generó una profunda decepción y tristeza en un país que vio frustrado su deseo de ganar “su” mundial en casa y sumar la sexta corona.

Afirmó que si su equipo logra ganar el tercer puesto en el Mundial “cambiará poco” el balance del equipo, pero una nueva derrota “empeorará todo”. “A medida que no juguemos bien, no ganemos o tengamos otra decepción, claro que va a empeorar todo, pero incluso una victoria podrá cambiar poco”.

Scolari admitió que luchar por el tercer lugar es un “sueño bien menor” que el objetivo inicialmente trazado por él mismo. El entrenador defendió su trabajo, con estadísticas en la mano, mostrando el número de goles que encajó en el Mundial antes del partido de Alemania y el balance de victorias desde que llegó a la selección a finales de 2012.

Convocaría a la misma gente

Decisión

Scolari subrayó que Brasil llegó a la semifinal y está “entre las cuatro mejores del mundo”, y aseguró que si tuviera que volver a elaborar la convocatoria, “probablemente” llamaría al “95%” de los jugadores con los que ha llegado hasta esta ronda del campeonato.

Neymar apoyará

Neymar, que está lesionado, volverá a la concentración de la selección para apoyar a sus compañeros después de la derrota por 1-7 contra Alemania y es casi seguro que acompañará al equipo a Brasilia el sábado para presenciar el partido del tercer y cuarto puesto, informó el jefe de prensa de Brasil, Rodrigo Paiva.

‘Arrogante’

Wagner Ribeiro, representante del atacante Neymar, calificó a Scolari, como un “viejo tonto, arrogante, prepotente y ridículo”. De forma irónica enumeró los requisitos que cumplió el DT: “Entrenar a la selección de Portugal y no ganar nada”; “ir al Chelsea y ser despedido”; “ir a entrenar a Uzbekistán” y “volver a Brasil, tomar un equipo grande y rebajarlo a Segunda división”, en referencia al Palmeiras.

‘Tite’ suena como el sucesor

AFP

Adenor Leonardo Bacchi Tite, paisano y discípulo de Luiz Felipe Scolari, es visto como el inminente sucesor en el banco de la selección absoluta de Brasil. Tite nació hace 53 años en Caxias do Sul, a 216 kilómetros de Passo Fundo, ciudad natal de Scolari, de 65 años. Ambas ciudades pertenecen al estado meridional de Río Grande do Sul, cuya capital es Porto Alegre.

El diario Folha de Sao Paulo y el portal deportivo Lance!net coinciden en que tras el desastre de Belo Horizonte, Scolari dirigirá su último partido el sábado, Tite, en 2012, llevó al Corinthians a la conquista de la Copa Libertadores y luego el Mundial de Clubes de la FIFA. Un año después se hizo con la Recopa Sudamericana y en 2008 ganó con el Internacional la Copa Sudamericana.

Es desempleado desde que dejó las filas del Corinthians a finales del año pasado y durante el Mundial su rostro es visto solo en comerciales de televisión. La decisión sobre la elección del sucesor de Scolari debe ser adoptada por el presidente de la Confederación Brasileña de Fútbol (CBF), José María Marín, y su sucesor, ya electo, Marco Polo del Nero.